La gran industria frena en seco: su consumo de luz y gas cae en junio a niveles del confinamiento
La gran industria ha frenado en seco su actividad en junio. El consumo de electricidad y gas de las grandes factorías se ha desplomado un 11,5% y un 20%, respectivamente, niveles no vistos desde el confinamiento por la pandemia, en abril y mayo de 2020. Este parón en la actividad de la industria agudiza el frenazo económico previsto para después del verano en España -y en Europa-. Todo, a las puertas de que el 1 de agosto empiecen los cortes en el consumo de gas propuestos este miércoles por Bruselas, que ha pedido a los países miembro que reduzcan un 15% la utilización de gas para hacer frente al «chantaje» de Vladímir Putin, presidente de Rusia.
De acuerdo con los datos de Red Eléctrica, el consumo eléctrico de la gran industria ha descendido en junio un 11,5%, cifra superior a la de marzo de este año y no vista desde el confinamiento. Este desplome ha dejado sin efecto el incremento en el consumo eléctrico del sector servicios, algo más del 5%, lo que deja el conjunto de la gran industria con un retroceso en junio de más del 5%.
En cuanto al consumo de gas, como publicó este diario, el desplome es del 20% sobre junio de hace un año, según Enagás, cifra también no vista desde el confinamiento. La actividad de la industria se ha frenado en seco, por tanto justo a las puertas de que Rusia decida si reanuda el suministro de gas a Europa a través del gasoducto Nord Stream, lo que marcará si se producen cortes de suministro de gas en Europa, acercando a países como Alemania a la recesión.
De momento, Gazprom ha señalado que no tiene la turbina que necesita para reanudar el bombeo de gas este jueves, mientras la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, ha asegurado que llegará a tiempo. Pero Bruselas teme que tarde o temprano Rusia corte el gas o reduzca al mínimo el suministro, por lo que ha pedido poderes para obligar a los países a reducir un 15% el consumo de gas en industria y familias en momentos de alerta. La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha señalado que España se opone a ese plan de Bruselas porque el país tiene recursos suficientes para aguantar los cortes de Rusia.
Frenazo económico
En cualquier caso, los posibles recortes en el consumo de gas, se produzcan o no, serán un problema añadido para la economía. Lo que nadie duda ya es del frenazo económico que se producirá también en España después del verano. El parón en la actividad de la industria añade más incertidumbre a la situación y agravará el frenazo.
La industria es una de los puntos fuertes de la economía del país. Por ejemplo, la metalurgia -hierro, acero…- o la industria del papel, cuyo consumo eléctrico ha caído en junio en más de un 20%. Ya hay ocho organismos que han rebajado su previsión de crecimiento para España por debajo del 4%. Moody´s es el más pesimista, y estima un crecimiento del 3,5% en 2022.